La historia de Pinocho nos habla de un carpintero que creo un muñeco de madera y pidió a una estrella que se convirtiera en un niño de verdad.
En una noche de hogar que tuve con mi familia, vi esa película y note ciertas peculiaridades que antes de ser miembro de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de lo Últimos Días había pasado por alto, detalles que les platicare en referencia a este cuento de Carlo Collodi.
La misma noche que Gepetto; que por cierto es el diminutivo de Giuseppe (José), pide a una estrella fugaz el deseo que su creación se convierta en un niño de verdad, un hada aparece en la casa del carpintero (cuando este ya dormía) y decide darle -un soplo de- vida a la marioneta y junto con ello dotarlo de un amigo “inseparable”, Pepe Grillo, personaje que tenía la función de fungir como una especie de consciencia de Pinocho.
Al llegar a esta parte recordé algo que viene en la GEE:

Conciencia

El sentido interior del bien y del mal, que proviene de la luz de Cristo que se da a todo ser humano (Moro. 7:16). Nacemos con la facultad natural de distinguir entre el bien y el mal debido a la luz de Cristo que se da a toda persona (DyC 84:46), la cual llamamos conciencia. El poseerla nos hace seres responsables. Como otras facultades, nuestra conciencia puede adormecerse con el pecado o el mal uso que hagamos de ella.

Regresando a la historia que nos compete, al siguiente día, al despertar Gepetto se encontró con una gran sorpresa, su muñeco había cobrado vida (entiéndase que aún no era un niño de verdad). Sorprendido el carpintero, tomo la decisión de mandar a Pinocho a la escuela, no sin antes darle una serie de indicaciones, mismas que vemos mas adelante, nuestro protagonista no siguió y por lo cual se metió en muchos problemas.Pinocho se dirigió a la escuela, pero en el camino se encontró con 2 audaces personajes que lo engañaron e hicieron que ignorara a su fiel acompañante, Pepe Grillo, recordándonos que la Luz de Cristo nunca nos abandona, sino son nuestros actos los que nos alejan de ella. Al hacer caso omiso a los consejos de Pepe Grillo, Pinocho termino en un Teatro, siendo parte del espectáculo y sin darse cuenta, se encontró presa de sus propias decisiones, trayendo a mi memoria una frase de Ezra Taft Benson:

“Somos libres para elegir, mas no para alterar las consecuencias de las elecciones”

Posterior a esto, el hada libro a Pinocho de este problema, pero le dejo un encantamiento en el que si mentía su nariz crecería hasta que comenzara a decir la verdad. Con ello cualquiera esperaría que ya no se metiera en problemas, sin embargo, mas adelante Pinocho se deja vencer por el mundo y se convierte en un burro (animal de carga), algo que de cierto modo nos ocurre cuando dejamos de lado lo espiritual y solo nos dedicamos a lo secular. En esta parte hago un paréntesis aclarando que darle nuestro tiempo a lo temporal no es malo, pero debemos buscar darle su tiempo y espacio a cada cosa y para dejarlo más claro les invito a ver el siguiente vídeo donde Elder Bednar explica el “equilibrio”:

A veces me disperso contando esta historia, pero es importante ir aclarando los puntos. Continuando con Pinocho, Pepe Grillo busca a toda costa ayudarle a liberarse y con ayuda de la hada, terminan en buen puerto, pero desafortunadamente, sus acciones terminaron teniendo mella en otros. Gepetto salió a buscarlo a la playa y fue devorado por una ballena, por lo cual, Pinocho tuvo que ir en su rescate y lanzarse al mar, donde también fue tragado por el Gran Pez (¿La historia de Jónas?
Afortunadamente, Pinocho logra rescatar a su padre y es cuando el hada lo convierte en un niño de carne y hueso, un niño de verdad.
Esta parte final de la historia trae a mi cabeza una confesión de José Smith:

“Durante el tiempo que transcurrió entre la ocasión en que vi la visión y el año mil ochocientos veintitrés habiéndoseme prohibido unirme a las sectas religiosas del día, cualquiera que fuese, teniendo pocos años, y perseguido por aquellos que debieron haber sido mis amigos y haberme tratado con bondad; y que si me creían engañado, debieron haber procurado de una manera apropiada y cariñosa rescatarme— me vi sujeto a toda especie de tentaciones; y, juntándome con toda clase de personas, frecuentemente cometía muchas imprudencias y manifestaba las debilidades de la juventud y las flaquezas de la naturaleza humana, lo cual, me da pena decirlo, me condujo a diversas tentaciones, ofensivas a la vista de Dios.
…sí fui culpable de levedad, y en ocasiones me asociaba con compañeros joviales, etc., cosa que no correspondía con la conducta que había de guardar uno que había sido llamado por Dios como yo.”

Los detractores de el mormonismo se agarran de los errores que cometió José Smith por su condición humana, así como la mayoría de la gente sigue relacionando a Pinocho con un personaje mentiroso y olvidan que al final de la historia se arrepiente de sus errores y termina salvando a su padre, así como José Smith, logro restaurar el evangelio de Jesucristo, aún después de haber cometido yerros.
Tener un testimonio de José Smith implica mas que creer que fue un Profeta de Dios, implica el saber que El Libro de Mormón, La Perla de Gran Precio, TJS y Doctrina y Convenios son verdaderos. Por cierto, al leer estos libros, asi como la historia de los pioneros y los sucesos a nivel internacional podemos darnos cuenta que Dios nos ha dado las mismas promesas e indicaciones una y otra vez, sin embargo, nuestra desobediencia a ocasionado que los mandamientos cada vez sean mas específicos y que las promesas las sigamos postergando para la siguiente generación. Para muestra, un botón, el éxodo pudo durar 12 días, pero se extendió a 40 años y fue la siguiente generación la que conoció la tierra prometida.
Tener un testimonio de José Smith implica saber que las tribulaciones sirven para nuestro desarrollo espiritual y que tanto JS como JC sufrieron a causa de defender la verdad. Para confirmar lo anterior basta leer en DyC 122:

5 Si te es requerido pasar tribulaciones; si te encuentras en peligro entre hermanos falsos; si estás en peligro entre ladrones; si peligras en tierra o mar;

6 si se te acusa con todo género de acusaciones falsas; si te acometen tus enemigos; si te apartan del lado de tu padre y madre, hermanos y hermanas; si con la espada desenvainada tus enemigos te arrebatan del seno de tu esposa y de tu familia, y tu hijo mayor, que solo tiene seis años de edad, se prende de tu ropa, diciendo: Padre mío, padre mío, ¿por qué no puedes quedarte con nosotros? Padre mío, ¿qué van a hacer contigo estos hombres?; y si entonces lo echan de tu lado a fuerza de espada, y te arrastran a la cárcel, y tus enemigos te rodean como lobosque buscan la sangre del cordero;

7 si eres echado en el foso o en manos de homicidas, y eres condenado a muerte; si eres arrojado al abismo; si las bravas olas conspiran contra ti; si el viento huracanado se hace tu enemigo; si los cielos se ennegrecen y todos los elementos se combinan para obstruir la vía; y sobre todo, si las puertas mismas del infierno se abren de par en par para tragarte, entiende, hijo mío, que todas estas cosas te servirán de experiencia, y serán para tu bien.

8 El Hijo del Hombre ha descendido debajo de todo ello. ¿Eres tú mayor que él?

Tener un testimonio de que José Smith implica a tratar a todos por igual y no excluir; incluso defender, a personas con diferentes ideologías y si no me creen les dejo esta declaración que realizó en 1843:

“Si se ha demostrado que estoy dispuesto a morir por un ‘mormón’, declaro sin temor ante los cielos que estoy igualmente dispuesto a morir en defensa de los derechos de un presbiteriano, un bautista o cualquier hombre bueno de la denominación que fuere; porque el mismo principio que hollaría los derechos de los Santos de los Últimos Días, atropellaría los derechos de los católicos romanos o de cualquier otra religión”

Así mismo, podría seguir dando ejemplos de lo que implica tener un testimonio de José Smith, pero mejor invito al hipotético lector a profundizar mas en el tema y revisar la historia de la iglesia con integro propósito.